La bacteria Xylella fastidiosa se transmite de unas plantas a otras a través de insectos vectores que se alimentan del xilema de las mismas. Philaenus spumarius está considerado como el principal vector de X. fastidiosa en Europa. Debido al papel fundamental de los vectores en la dispersión del patógeno, su control es una de las herramientas más importantes para la contención de la enfermedad. La ausencia de productos específicos para su control se debe a que este insecto no ha sido considerado como un problema relevante hasta su confirmación como transmisor de X. fastidiosa.
Una vez evidenciada la gravedad del problema causado por X. fastidiosa en Europa y la falta de productos registrados para P. spumarius, en Italia se iniciaron varios trabajos para evaluar la eficacia de varios insecticidas para el control del vector. Los insecticidas piretroides y neonicotinoides son los productos que mostraron los niveles de control más elevados, aunque estos últimos tiene limitaciones de uso en la UE. Por otra parte, formulados a base de acetamiprid y ciantraniliprol mostraron también una alta eficacia contra P. spumarius. Estos productos podrían integrase en las estrategias de control de las poblaciones de vectores en el marco de los programas de contención de X. fastidiosa. No obstante, además de evaluar la eficacia de los insecticidas en condiciones de laboratorio, es fundamental definir su comportamiento (eficacia y persistencia) en condiciones de campo.
Con el objetivo de reducir la eficiencia de transmisión del vector y prevenir las infecciones de X. fastidiosa en condiciones de agricultura ecológica, se realizaron aplicaciones de caolín en una plantación joven de olivos en Italia expuesta al patógeno. Estas aplicaciones no resultaron efectivas para prevenir las infecciones de X. fastidiosa. En las plantas control, tratadas con un insecticida a base de imidacloprid, aunque en menor medida se produjeron también infecciones.
Los estadios juveniles de los vectores de X. fastidiosa están generalmente asociados a plantas herbáceas, por lo que la eliminación de esta vegetación arvense en los huertos de olivos se ha propuesto como un método de control de P. spumarius. De hecho, se han intentado varias aproximaciones para implementar estrategias de control de estos estadios juveniles, al ser esta la etapa de su ciclo cuando son más vulnerables y el control puede ser más eficiente. Con el objetivo de buscar métodos alternativos al control mecánico de las malas hierbas, se sembraron varias especies de gramíneas para reemplazar la vegetación arvense natural de los huertos de olivos, comparando sus efectos con aplicaciones de herbicidas químicos y escarda térmica. Los resultados obtenidos indicaron que el laboreo del suelo, la escarda térmica y los herbicidas químicos aplicados en primavera fueron las únicas intervenciones capaces de reducir casi a cero la presencia de juveniles de P. spumarius.
Dongiovanni C, Fumarola G, Di Carolo M, Tauro D, Cavalieri V (2019) Strategies for reducing vector populations and transmission of Xylella fastidiosa in olive groves. Book of Abstracts Second European conference on Xylella fastidiosa, Ajaccio, Corsica.